Las baldosas de travertino son encantadoras. Sus ligeras imperfecciones y su rica gama de colores y tonos resultan complejos y cautivadores. Es una opción económica para los propietarios que buscan crear un ambiente terroso y cálido.
Dado que esta piedra natural es fácil de cuidar, es una gran elección para las personas que no tienen tiempo de mantener otros tipos de suelos. Se puede utilizar en prácticamente todas las áreas de la casa, y se verá tan hermosa en las paredes como lo hace en los pisos. Las baldosas de travertino son la opción perfecta para los propietarios que desean una casa preciosa sin complicaciones.
Procede de Italia, México, Turquía y Perú. Estos son los lugares más populares para las canteras de travertino, que suelen estar cerca de manantiales de agua caliente. Es un material sedimentario y suele tener agujeros naturales. Estos agujeros se rellenan con un aditivo a base de cemento al que se añaden colores. Por ejemplo, el travertino relleno y apomazado es muy popular en climas cálidos.
El travertino romano de Tivoli, el travertino Ivory de Turquía son algunas de las variedades más conocidas. Además, existen dos familias principales de este material. Crosscut y Vein cut. Éstas indican la dirección de las vetas del lecho del río. Este material desgasta bien el tránsito y es más fácil de mantener.
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